Según llegamos a Madrid se celebraba Fashion Night Out Madrid 2009, fiesta celebrada por la revista Vogue, y yo con estos pelos, en varias tiendas de moda de Madrid había música y bebida, pude ver varias de las que teníamos cerca del Hotel. En unas podías beber mojitos recién hechos por unos camareros muy sonrientes, en otra una camarera monísima y altísima te servía champan y te hacían fotos, por momentos me sentía más patito feo que nunca.
Por lo que he podido leer en muchos de estos locales han estado gente como Patricia Conde, Laura Pamplona (que cantó con su grupo Sweet Wasabi), Alaska y su marido y muchísima más gente famosa de Madrid, y yo sin haber pasado por donde Aldo y con el vestido arrugado del viaje en bus y sin maquillaje.
Ahorré en equipaje metiendo lo justo, apenas un colorete y máscara de pestañas, que triste eso era lo más glam que llevaba a cuestas, ahora eso si en el próximo a mi no me pillan de pardilla, es posible que hasta le haga hueco a unos buenos tacones, pues no saben con quién se han topao.
Aunque si he de decir la verdad tal y como estaban los alrededores de obras, agujeros, rampas, arena y piedras, casi, casi era mejor meter las botas de monte y los arneses, porque estaba pelín peligroso. No me voy a quejar más de las zanjas que hay en Bilbao.
Al día siguiente, el gran día y yo sin secador, pero ¡que viaje por favor! Estamos acostumbrados a que en los hoteles siempre hay secador de pelo y no lo comprobé en la web, bueno a ver cual es el resultado, y cuál iba a ser¡¡ que parecía que acababa de salir de una pelea de gallos, sólo me faltaban las plumas.
Cogimos el metro rumbo a IFEMA, parada Campo de las Naciones, impresionante, el BEC es grande pero IFEMA impresiona. Había gente por todas partes, los hombres de traje y las mujeres subidas a unos andamios y maquilladas como puertas y yo con mi pelea de gallos en la cabeza, a mi no me pillan en otra igual.
Según entramos en la Feria nos acercamos al mostrador para pagar nuestra entrada y cuál fue nuestra sorpresa cuando una chavalita, que acababa de salir del cole, nos comenta muy amablemente que si no somos profesionales no nos dejan entrar, ¿¡cómo!?, a no, eso sí que no, hombre una cosa es pasearse por Madrid con estos pelos y otra es que me haga el viaje para nada.
Nos acercamos al mostrador de información y allí es donde descubro que el que no llora no mama. Le comentamos a la chica de información nuestro pequeño mal entendido, pensábamos que se podía entrar pagando la entrada, pero para variar las chicas de información son todas igual de desagradables y tienen el guión muy bien aprendido y nos dice que nanai. Pero, parece que hay un claro de luz entre tantos desastres, la representante de IFEMA en París estaba a nuestro lado y nos escuchó y muy amablemente nos ofreció 2 invitaciones, vive la france¡¡, fue un encanto es más incluso nos dio su tarjeta, espero no olvidarme de darle las gracias. Luego claro también tienes al geta de turno que cuando oyó lo de las invitaciones el también quería una, pero bueno.
Rellenamos las invitaciones y nos dieron nuestras acreditaciones,¡ ja!, ahora sí que me siento importante, colgando del cuello las tarjetitas con nuestros nombre que nos daba paso a la feria, y totalmente gratis.
Aquello asustaba un poco, no sabías por donde empezar, todo brillaba, una enorme alfombra negra en la que en algunos stands esparcieron purpurinas y brillantitos por el suelo, yo sólo quería ir dejando un rastro de migas de pan para saber por dónde andar y por donde volver.
Estuvo francamente bien y realmente agotador. Bisutex son todo joyas y complementos y en Iberjoya tienes todos los elementos para crearlas, pero para variar no todo iba a ir bien a la primera, con nuestra acreditación no podíamos entrar en Iberjoya. Pero bueno que hemos hecho mal nosotras? Vemos un stand de información de Iberjoya , le comentamos a la chica nuestro problema y tenemos la suerte de que es muy simpática y nos da dos invitaciones para visitar Iberjoya.
Lo malo de esto es que no siendo profesionales nos tenemos que comer las uñas, no nos dejan comprar nada, ahora catálogos todos los del mundo, mi espalda ya no puede más.
Los más impresionantes en Iberjoya son los hindúes, sólo puedes comprarles en las ferias pero son los que tienen los precios más económicos, ahora eso si te cuesta entenderles. Hay una cadena griega que también tiene cosas muy bonitas pero en ferias también.
Desde las 9 de la mañana hasta las 6-7 de la tarde sin parar, llenas de catálogos, a la próxima maletita con ruedas para cargar con todo que además queda como muy profesional y muy chic.
Al día siguiente visité varias tiendas de abalorios de Madrid que me recomendaron y algunas que descubrí en internet. Almacenes Cobián y Pontejos, Laku, Cuentas artesanas, Cibeles, única… casi, casi, nos recorrimos Madrid entero.
La verdad es que no hemos parado un segundo y hemos visto cosas increíbles, a pesar de nuestros desastres, ha merecido mucho la pena el viaje.
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